El equipo de Marketing & Consumo hemos asistido a numerosas ferias de nuestro sector y, como asistentes y, además, expertos en marketing, tenemos muy en cuenta todos y cada uno de los detalles marketeros que las rodean.
Una feria sectorial es un punto de encuentro y una puesta de largo del sector. Durante unos pocos e intensos días hay que darlo todo y mostrar lo mejor de uno mismo a un público preparado y exigente.
La asistencia a una feria requiere de una exhaustiva y minuciosa preparación previa para que todo salga a pedir de boca. Todo lo que se muestra desde un stand de feria es el resultado un trabajo previo. Hay toda una serie de acciones pre, durante y post feria necesarios si quieres obtener los mejores resultados.
Dentro del checklist de tareas para preparar tu feria vamos a centrarnos en el punto de la elección de artículos promocionales.
¿Por qué es importante dedicarle unos minutos a pensar en la selección de los artículos promocionales?
Esta selección está sujeta a dos factores fundamentales que son los objetivos y el presupuesto dedicado a esta partida en concreto.
Los objetivos van desde estar al día de las innovaciones del sector, conseguir más contactos, generar oportunidades de negocio, conseguir o potenciar la notoriedad de marca, hasta la conversión más directa que es la generación de ventas en la propia feria. Los objetivos dependerán del momento en el que se encuentre la empresa y de las propias características de la feria.
Bajo el marco de los objetivos que queremos cumplir tenemos que ajustarnos al presupuesto disponible. Como los recursos siempre tienen un límite hemos de plantearnos que los artículos promocionales que elijamos nos ayuden a cumplir de una forma más eficiente nuestros objetivos.
Partiendo de esas premisas, los obsequios promocionales que entregues en la feria deberían cumplir varias funciones:
- Recuerdo de marca. Si el objeto es cotidiano conseguirá que nuestra marca esté presente en aspectos cotidianos de la vida. Esto genera un mayor recuerdo de marca.
- Practicidad. Si el obsequio es práctico será más usado, esto nos lleva al tercer punto…
- Uso recurrente (cuando mayor mejor), si nuestra marca está visible por un uso repetido tendrá una mayor exposición frente a terceros.
Dentro de estas características podemos señalar algunos artículos de promoción que se usan típicamente en ferias, como pueden ser:
- Bolígrafos: un clásico básico. Cumple muy bien los requisitos 1 y 2 y, aunque la recurrencia en el uso no está garantizada es fácil de distribuir y de pasar por varias manos. Es muy práctico.
- Libretas: un complemento muy atractivo para el primero, pueden ir en pack. En este caso la exposición de la marca es menor y, aunque puede ser un objeto valorado como obsequio, para el caso de una feria hay que tener en cuenta que puede resultar poco práctico el hecho de tener que llevarlo encima.
- USB: cumple muy bien las funciones 2 y 3, aunque en este hay que valorar que la exposición de la marca es menor (sobre todo durante la feria) y el coste es mayor.
- Tazas: van muy bien luego para tomar café en la oficina, pero son poco prácticas de llevar durante la feria. Por lo demás cumplen muy bien las 3 funcionalidades básicas.
- Bolsas: cumplen a la perfección las funciones de: recuerdo de marca, practicidad y uso recurrente. Además, son perfectas para incluir toda la documentación comercial que aportes a los visitantes de tu stand y la del resto de expositores. Los visitantes pueden usarla para ir depositando toda la información que van recopilando en la feria dando una visibilidad extra a tu marca durante y la feria y posteriormente puesto que son reutilizables.
Las bolsas publicitarias disponen de un amplio espacio donde estampar tu logo o un claim atractivo y con gancho. Además, nos ofrecen gran versatilidad en:
- Tejidos: poliéster, algodón, algodón orgánico, non-woven, yute.
- Tamaños: desde bolsas plegables a bolsas amplias y resistentes.
- Gramaje: en el caso de las bolsas de algodón que van desde 105 gramos a 280 gramos la de más calidad.
- Colores: una amplia gama de colores nos permitirá la personalización adecuada.
Las bolsas non-woven personalizadas se utilizan muchísimo en ferias pues resultan muy prácticas para poner documentación publicitaria ya que son ligeras y ocupan poco espacio, están en cierta medida sustituyendo a las carpetas en las ferias. Además, son una opción muy económica.
Frente a la opción de las bolsas non-woven tenemos la opción de las bolsas de algodón, incluso la opción del algodón orgánico como opción más sostenible. Este tejido nos permite escoger entre distintos gramajes, a mayor gramaje mayor calidad y resistencia. Por lo cual, para ferias donde los visitantes van recogiendo mucha información y obsequios de los expositores nos parece mejor opción una bolsa de algodón amplia, resistente con las asas largas, donde nuestro logo esté bien visible y donde se pueda ir metiendo toda la información y obsequios de la feria. Así, las bolsas non-woven de la competencia pueden acabar dentro de la nuestra 😊
Tiene un punto extra de visibilidad porque las bolsas grandes, sobre todo si son resistentes y cómodas de llevar, que el asa te permita llevarla en la mano o en el hombro, tendrán mucha vida después de la feria y ganarás una exposición extra de tu marca.
Estos son nuestros consejos, ahora te toca a ti valorar tus objetivos, tu presupuesto y decidir 😉.
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